viernes, 27 de agosto de 2010

QUÉ ENTIENDE POR DESARROLLO?

Es la satisfacción constante de las necesidades básicas y el goce de un bienestar social y cultural, para una población en crecimiento armónico con las posiblidades para producir la demanda y oferta de bienes y servicios requerida para ello.

domingo, 22 de agosto de 2010

ECONOMÍA, ECOLOGÍA Y MEDIO AMBIENTE FRENTE A LOS MODELOS DE DESARROLLO

ECONOMÍA, ECOLOGÍA Y MEDIO AMBIENTE FRENTE A LOS MODELOS DE DESARROLLO

Lecciones Aprendidas Módulo Desarrollo Sostenible

Para la persona desprevenida, que no tenga mayor interés en los temas enunciados en el título del presente ensayo, quizás entienda que se trata de asuntos que deban ser asumidos desde una óptica de estudio muy particular y que los mismos no tengan mayor relación entre sí, mucho menos que ellos constituyan marcos teóricos entrelazados sobre los modelos de desarrollo en nuestra actualidad.

Más aún, se tiene evidencia de tendencias clásicas sobre una orientación desarticulada de dichos saberes, dejando en el terreno de los especialistas aspectos que bien pueden ilustrarse u orientarse desde una concepción integral, sistémica u holística del conocimiento.

Por Economía debemos entender “la ciencia social que estudia las relaciones sociales que tienen que ver con los procesos de producción, intercambio, distribución y consumo de bienes y servicios, entendidos estos como medios de satisfacción de necesidades humanas y resultado individual o colectivo de la sociedad”[1], o de manera más simple, como el estudio de las relaciones sociales requeridas para satisfacer las necesidades humanas con los recursos existentes.

No obstante la claridad de esta definición, debemos observar que sobre este objeto de la ciencia, existen visiones o enfoques que difieren en la forma de abordar este ámbito del conocimiento[2].

Para la Economía normativa[3] se entiende que esta busca explicación de fenómenos sociales que tiene una base histórica y política, apoyada en personas, líderes y sociedades, que han dado lugar a las diversas civilizaciones transformando la humanidad. Por ende la economía ha de responder a posturas ideológicas y políticas, en un determinado contexto y momento histórico.

Por el contrario, existe otro enfoque dado por la Economía Positivista, desde la cual se buscan respuestas objetivas sobre el funcionamiento de los fenómenos económicos, al ser asimilados a los fenómenos de la naturaleza, en forma objetiva e incontrovertible. No hay por tanto juicios de valor, ni son admisibles las posturas políticas o ideológicas.

Desde la postura positivista de la Economía, difícilmente tienen cabida conceptos como el de justicia o equidad, ni qué decir de la sostenibilidad. Desde este punto de vista se hacen proyecciones teóricas sobre la economía, muchas veces desfasadas de la realidad. Pero acá es necesario entender la diferencia entre economía política y política económica, por cuanto los vacíos de las posturas positivistas no necesariamente se deben a deficiencias en materia de economía política.

La ciencia económica considera el comportamiento humano de manera abstracta, en el marco de leyes dotadas de un carácter eminentemente hipotético sobre las relaciones de los individuos entre sí para organizar la producción colectiva. Por el contrario, la política económica[4] no debe prescindir del factor humano, y en su formulación debe tener en cuenta factores condicionantes, situaciones coyunturales y circunstancias reales que efectivamente influyen en el comportamiento del individuo y la colectividad.

La economía normativa[5], además de los necesarios razonamientos científicos, se ocupa por planteamientos de acción basados en juicios de valor personales y subjetivos. Parte de lineamientos que responden a criterios éticos, ideológicos o políticos, sobre lo que se considera deseable o indeseable. Por tanto las acciones económicas están dirigidas a un fin, tiene un sentido finalista, y este respalda y justifica todo el marco de interrelaciones presentadas en la sociedad para garantizar la paz y la tranquilidad.

En el contexto del Estado Social de Derecho que prescribe nuestra Carta política, la economía no está sujeta a las leyes propias del mercado, según la dinámica privatista o individualista de los sujetos que actúan en el mismo. Nuestra Constitución Política por tanto adopta una clara orientación ética y política y deja en el Estado, el deber de precisar los límites de la libertad económica[6]. El Estado por mandato de ley intervendrá la economía en lo relacionado con la explotación de los recursos naturales, el uso del suelo, producción, distribución, utilización y consumo de bienes y en los servicios públicos y privados; esto con el fin de “conseguir el mejoramiento de la calidad de vida de los habitantes, la distribución equitativa de las oportunidades y los beneficios del desarrollo y la preservación de un ambiente sano”[7]

La Constitución Política presenta muy claro su mensaje: “La actividad económica y la iniciativa privada son libres, dentro de los límites del bien común.” “La libre competencia económica es un derecho de todos que supone responsabilidades”. “La empresa, como base del desarrollo, tiene una función social que implica obligaciones”. “El Estado fortalecerá las organizaciones solidarias y estimulará el desarrollo empresarial”. “La Ley delimitará el alcance de la libertad económica cuando así lo exijan el interés social, el ambiente y el patrimonio cultural de la Nación” (art. 333).

No se trata de meras formulaciones principialísticas cuya inaplicación sea inocua. Por el contrario estamos haciendo referencia a verdaderos mandatos constitucionales de eficacia material, que imponen a las autoridades el deber de intervenir en la economía y no el simple dejar hacer y dejar pasar del estado lassefierano de principios de siglo.

Enfoques y tendencias que igual se presentan en los campos de la Ecología y el Medio Ambiente, para entender como pasa en la Economía, que bien se pueden estudiar cualquiera de ellas sin reparo por consideraciones éticas o políticas, o bien, entendiendo su sentido finalista.

La Ecología se define como la ciencia que estudia la estructura y función de la naturaleza y las relaciones existentes entre los seres vivos y el medio en que habitan[8]. Podemos entender la Ecología solo como el estudio de las interacciones entre los organismos y la transformación de los flujos de energía y materia, para lo cual bastará con los resultados de laboratorio, sin referencia alguna a los aspectos subjetivos, éticos o políticos de los problemas que estos presentan. Hoy se hace más evidente este contrasentido, cuando apreciamos la pérdida de los recursos naturales, y sabemos que es muy difícil seguir sosteniendo una mirada imparcial en el estudio del hábitat o el medio ambiente, prescindiendo de los juicios o los valores ante su evidente degradación.

En el desarrollo histórico de la humanidad parece que los efectos del progreso de las naciones sobre el ambiente y todas las formas de vida, incluso la propia, son más apremiantes en el desarrollo de políticas económicas y sociales, que los más de 100 años de economía industrial y lucha de clases, presentada en casi todas las naciones el mundo civilizado. Hemos llegado por el estrés del medio ambiente a tener tiempo en el poco que nos queda para desarrollar la suficiente y necesaria sensibilidad que se requiere para pensar en que el desarrollo no puede ser solo crecimiento económico a ultranza.

Debemos por tanto entender que ha llegado el final del positivismo en la filosofía económica y política. Hoy estamos vivenciando la necesidad de incorporar las ciencias sociales y humanas en los estudios científicos. De esta manera estamos dando lugar a un nuevo campo interdisciplinario, para dar lugar a una nueva disciplina llamada Ciencia Ambiental[9].
La Ciencia Ambiental parte del reconocimiento de que los problemas ambientales que afectan a las personas y a otros organismos, tiene una naturaleza interrelacionada. El concepto de ecosistemas precisamente hace referencia a esta interrelación, tendiendo en cuenta además el contexto geográfico o espacial en que se enfoca cada estudio, aunque hoy se tiene cada vez más conciencia que estos problemas tiene una connotación más global.

El origen de la Economía Ecológica se encuentra en este mismo sentido, al definirse como una transdisciplina científica en torno al nuevo paradigma del Desarrollo sostenible[10], el cual impone límites al crecimiento económico.

Desde este marco holístico y sistemático del conocimiento hoy podemos hablar de Derecho ambiental, química ambiental, física ambiental, para dar a entender que en todos ámbitos de la ciencia, prevalece una finalidad que no puede ser otra que el desarrollo humano con calidad de vida y protección del medio ambiente. Lo mismo sucede en el ámbito de las ciencias sociales en las que ya se habla de ética ambiental, Política ambiental, sociología ambiental, psicología ambiental, etc.

Este especial punto de vista interdisciplinario nos lleva a un reto muy grande para la educación dado que los esquemas tradicionales se han caracterizado por programas o currículos especializados que poco espacio dejan a otras materias o ciencias, cuando el profesional que hoy sale a ejercer su profesión se enfrenta a una sociedad que espera y demanda soluciones integrales a problemas multicausales. Este “rezago cultural”[11] es propio de muestras instituciones educativas y de los modelos de desarrollo que pretenden perpetuar estructuras y relaciones de poder que no se encuentran interesadas en generar los cambios educativos y en los modelos de desarrollo imperantes.

En esta integralidad y entendimiento sistemático de los ámbitos del conocimiento, se evidencia la necesidad de estudios pertinentes a las problemáticas sociales y económicas del medio actual, para lo cual ya no es posible limitar el terreno de las ciencias y la cultura solo a sus propias y específicas leyes o principios, sin considerar otros campos del conocimiento que le son transversales.

Estamos en un nuevo de terreno en el desarrollo de las ciencias, en el que lo ambiental se expresa como referente central en el debate científico. Es este el nuevo punto de confrontación de las ideas, hacia el que todos los intereses se han conjugar como expresión de poder.

A manera de hipótesis, podemos decir que el proteccionismo ambiental y el modelo de crecimiento o desarrollo sustentable, parece recoger el sentir de la voluntad general, apoyado en las nuevas expresiones del conocimiento y el saber, a las que ya se ha hecho referencia.

Falta expresar esta dinámica en las diversas dimensiones de sostenibilidad. Antes se ha hecho referencia a la Sostenibilidad Educativa., sobre todo en relación con el reto de ser el soporte conceptual de todo modelo de desarrollo. Pero le siguen con no menos importancia la sostenibilidad política y social apoyada en la participación de la sociedad civil y el ejercicio del poder democrático; la sostenibilidad cultural, creando identidad y pertenencia hacia el medio y su desarrollo.

Cuando la sociedad civil, debidamente educada y con verdaderos espacios de participación, establezca una verdadera identidad sobre el desarrollo que en términos de sostenibilidad sea el indicado para cada región, podemos en verdad propiciar alternativas justas y equitativas de calidad de vida para todas las personas.








[1] http://es.wikipedia.org/wiki/Econom%C3%ADa
[2] http://html.rincondelvago.com/economia_9.html.
[3] Gran Enciclopedia ESPASA 2005 Editorial Planeta S. A.
[4] “Economía, Positivismo y moral”. Jorge Peña Vidal. En Línea: http://docs.google.com/viewer?a=v&q=cache:NzgPdQBRSuoJ:www.cepchile.cl/dms/archivo_834_1000/rev20_penavial.pdf+%22econom%C3%ADa+positivista%22&hl=es&gl=co&pid=bl&srcid=ADGEESju0CYlzhtPfvGMsakbSjUy0tvhXWa2S07910BvMxI4NiRbJmS6inX2pNIVR921_IDdlvoinwVMPPJTNCKRoZNXIr8K1NEB-3pIlrN4ZUmLbq4RYqlLcILfn6WNmClcpv0n-TdW&sig=AHIEtbT2pZE4vmeQiRLCccG_gfjLlud8Lw
[5] Gran Enciclopedia ESPASA 2005 Editorial Planeta S. A.
[6] Constitución Política de Colombia, Artículo 150 numeral 21
[7] Constitución Política de Colombia, Artículo 150 numeral 334
[8] Gran Enciclopedia ESPASA 2005 Editorial Planeta S. A.
[9] Ciencia Ambiental. Un estudio de Interrelaciones. Eldon Enger y Smith. Mc Graw Hill México 2006
[10] Economía Ecológica. Material de Estudio Maestría Medio Ambiente y Desarrollo Sostenible. Universidad de Manizales.
[11] Economía Ambiental, Economía Ecológica y Desarrollo Sostenible. Material de Estudio Maestría Medio Ambiente y Desarrollo Sostenible. Universidad de Manizales.